Después de pasar por los tratamientos de depilación láser, hay que tener en cuenta la forma en la que cuidamos la piel. Esto es importante no solo para mantener la piel lo más hidratada que nos sea posible, sino también para saber cómo es necesario depilarse después de las primeras sesiones.
Las clínicas de depilación pueden orientar un poco sobre cómo acudir la primera vez que va a hacerse la depilación láser, pero depende del tipo de aparato que se vaya a usar. Lo más común es que el paciente que todavía no ha experimentado la depilación láser llegue rasurado a la clínica.
Es normal que haya varias sesiones hasta llegar a la depilación completa y definitiva, pero cada sesión elimina un buen porcentaje de vello. Eso sí, depende mucho del tipo de piel y de vello, los más oscuros suelen ser más agradecidos y tener más efecto.
La opción ideal es el rasurado
Para las épocas que hay entre sesiones de depilación láser, la mejor opción es la del rasurado. Si se
hace una depilación con cera o con máquinas como la silképil, el láser no tendrá el mismo efecto y el
pelo debe dejarse crecer de nuevo.