La piel seca es aquella piel tirante, áspera y con descamaciones tanto en la cara como en el cuerpo. En ocasiones, los síntomas también pueden ir acompañados de picores o ardores. En la mayoría de los casos, si notamos una sensación desagradable de tirantez en el rosto denota que nuestra piel es seca o muy seca. ¿Sabes identificar si tienes la piel seca?
La sequedad de la piel tiende a confundirse con la piel deshidratada. Sin embargo, esta condición de piel deshidratada puede darse en cualquier tipo de piel en algún momento de nuestras vidas. Por el contrario, en las pieles secas o muy secas, la deshidratación es genética.
Dentro de la piel seca, se pueden distinguir tres estados:
1. La piel seca es aquella que sufre una tirantez y descamación ligera, por lo que la sensación de incomodidad no es tan fuerte.
2. La piel muy seca tiene una descamación más intensa llegando incluso a provocar agrietamientos y fisuras. Tener este tipo de piel ya empieza a ser más molesto e incómodo por la tirantez constante de la piel.
3. Cuando la piel es áspera y rugosa con una sequedad extrema hablamos de Xerosis Preatópica. Si nos encontramos en esta fase sería conveniente que nos pongamos en manos de expertos para iniciar un tratamiento eficaz que elimine las molestias provocadas por las irritaciones de la piel.