Si queremos disfrutar de unas pestañas bellas, es importante que las cuidemos. En ocasiones podemos apreciar que, de forma paulatina o repentina, nuestras pestañas se reducen en número considerablemente. Es posible que esto suceda debido a una gran variedad de causas, si notamos que se reduce la densidad de nuestras pestañas, no debemos asustarnos, solo deberemos encontrar la razón por lo que sucede para poder poner solución.
Es normal que nuestras pestañas se caigan, especialmente cuando nos desmaquillamos o frotamos nuestros ojos. Sin embargo, si notamos que nuestras pestañas son más pobres o que la caída está por encima de lo normal, deberemos buscar la razón por la que esto ocurre. Éstas son algunas de las razones:
Bajas defensas
Existen momentos en los que nuestras defensas se debilitan. Esto puede hacer que seamos más propensos a sufrir enfermedades, que nuestras uñas se rompan con mayor facilidad y que nuestro pelo sea más débil, también el del rostro.
Cambios hormonales
En nuestro cuerpo a menudo se producen cambios hormonales, por ejemplo durante el embarazo, la menstruación, la menopausia o si padecemos problemas de tiroides. Estos cambios pueden hacer que nuestras pestañas se debiliten y caigan con mayor facilidad.
Falta de vitaminas
Llevar una dieta pobre en determinados nutrientes puede favorecer a la posibilidad de que nuestras pestañas se caigan. De este modo, la falta de vitamina A, B, E u omega 3 puede hacer que se presenten problemas de cabello, debido a que intervienen en la salud de nuestro pelo, también el de las pestañas.
Si quieres conocer más razones por las que se caen las pestañas mantente atento a nuestro blog.