Los fisiopapilomas son tumores benignos que pueden aparecer en la piel de los seres humanos. También se les conoce como papilomas cutáneos o verrugas filiformes. Estos crecimientos son causados por una infección viral con el virus del papiloma humano (VPH).
Los fisiopapilomas suelen tener una apariencia similar a una verruga, pero son más finos y alargados. Pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo, pero son más comunes en el cuello, la cara y las axilas. Aunque los fisiopapilomas son generalmente inofensivos, pueden ser molestos o antiestéticos.
La mayoría de los fisiopapilomas se eliminan con la extirpación con tijeras o bisturí, o la aplicación de nitrógeno líquido para congelar el crecimiento. También existen tratamientos tópicos que pueden ayudar a disminuir la apariencia de los fisiopapilomas, aunque estos no son tan efectivos como los anteriores.
Es importante destacar que aunque los fisiopapilomas no son peligrosos en sí mismos, la infección viral que los causa (VPH) puede tener consecuencias más graves si no se trata. Algunas cepas del VPH están relacionadas con el cáncer de cuello uterino, por lo que es importante que las personas se sometan a pruebas de detección regulares para detectar cualquier posible infección.
En resumen, los fisiopapilomas son tumores benignos de la piel que son causados por una infección viral con el VPH. Aunque generalmente no son peligrosos, pueden ser molestos o antiestéticos, y deben ser tratados adecuadamente.